LA IGLESIA, OFICIOS Y SACRAMENTOS

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1. LOS APÓSTOLES

Como doce de las personas que fueron discípulos de Cristo posteriormente se convirtieron en sus apóstoles, estas dos palabras, discípulo y apóstol suelen ser confundidas entre sí. Aunque los términos suelen utilizarse indistintamente, no son exactamente sinónimos. La Biblia define a un discípulo como un "alumno", alguien que ha entrado a la comunión de la instrucción rabínica de Jesús. Aunque los apóstoles fueron discípulos, no todos los discípulos se convirtieron en apóstoles.
Un apóstol disfrutaba de una función especial en la iglesia del Nuevo Testamento. La palabra apóstol significa "alguien que es enviado". Técnicamente, sin embargo, un apóstol era más que un mensajero. Había sido comisionado con la autoridad para hablar en nombre de Aquel que lo había enviado y para representarlo. El Apóstol principal en el Nuevo Testamento es el mismo Jesús. Él había sido enviado por el Padre y hablaba con la autoridad que le había sido investida por el Padre. Rechazar a Jesús era rechazar al Padre que lo había enviado.
De manera similar, los apóstoles habían sido llamados y comisionados por Cristo y hablaban con su autoridad. Rechazar la autoridad apostólica era rechazar la autoridad de Cristo, que los había enviado.
En el Nuevo Testamento, doce discípulos fueron comisionados como apóstoles. Después de la muerte de Judas, la iglesia llenó esa vacante eligiendo a Matías, como lo registra el libro de los Hechos. A este número Jesús agregó al apóstol Pablo como el apóstol especial para los gentiles. El apostolado de Pablo era un tema algo debatido porque no reunía todos los requisitos para el apostolado, establecidos en los Hechos. El criterio para el apostolado incluía
(1) Haber sido un discípulo de Jesús durante su ministerio sobre esta tierra.
(2) Haber sido testigo de su resurrección, Y:
(3) haber sido llamado y comisionado directamente por Cristo.
Pablo no había sido discípulo de Cristo, y su visión del Cristo resucitado tuvo lugar después de la ascensión de Jesús.
Pablo no había sido un testigo directo de la resurrección de la misma manera que lo habían sido los otros apóstoles. Sin embargo, Pablo fue llamado directamente para ejercer esta función por Cristo. Su llamado fue confirmado por los demás apóstoles, sobre cuyo apostolado no cabía la menor duda, y fue autenticado por los milagros que Dios realizó por intermedio de Pablo, dando testimonio de su autoridad como agente apostólico de la revelación.
A fines del primer siglo, los padres post-apostólicos reconocieron que su autoridad estaba subordinada a la de los apóstoles originales. En la actualidad, no hay apóstoles oficiales en vida ya que nadie reúne los requisitos bíblicos para esta función ni puede ser confirmado por los apóstoles originales, como lo fue Pablo.
La Biblia es la única autoridad apostólica que tenemos en la actualidad.
RESUMEN
1. Las palabras discípulo y apóstol no son sinónimos.
Discípulo e alumno, Apóstol e alguien que ha sido enviado con autoridad para hablar en nombre del que lo comisionó
2. Jesús fue "el Apóstol del Padre".
3. Los requisitos bíblicos para el apostolado consistían en haber sido:
(A) Un discípulo de Jesús.
(B) Un testigo de la resurrección de Jesús.
(C) Llamado directamente por Cristo.
4. El apostolado de Pablo fue singular, y fue necesario que él fuera confirmado por los otros apóstoles.
5. En la actualidad no existen apóstoles en el sentido bíblico.
6. La autoridad apostólica en la actualidad la encontramos en la Biblia.
PASAJES BÍBLICOS PARA LA REFLEXIÓN
Romanos 1:1-6, Romanos 11:13, 1 Corintios 9:2, 1 Corintios 15:9, Hebreos 3:1.

2. LA IGLESIA

La iglesia se refiere a todas las personas que pertenecen al Señor, que han sido compradas por la sangre de Cristo. Hay diversas imágenes y expresiones que son también utilizadas para definir o describir a la iglesia. La iglesia es llamada, entre otras cosas, el cuerpo de Cristo, la familia de Dios, el pueblo de Dios, los escogidos, la esposa de Cristo, la compañía de los redimidos, la nueva Israel.
La palabra que utiliza el Nuevo Testamento para iglesia, de donde proviene nuestra palabra eclesiástico, significa "aquellos que han sido llamados". La iglesia puede ser concebida como una asamblea o reunión de los escogidos, aquellos que Dios ha llamado a apartarse de este mundo, del pecado, y los ha llamado a un estado de gracia.
Como la iglesia sobre esta tierra es siempre lo que San Agustín llamó "un cuerpo mezclado", se hace necesario que diferenciemos entre la iglesia visible y la iglesia invisible. En la iglesia visible (conformada por aquellas personas que han hecho una profesión de fe, han sido bautizadas, y se han hecho miembros de la iglesia institucional), Jesús nos dice que los abrojos van a crecer junto con el trigo. Aunque la iglesia es "santa", tiene siempre en la actualidad mezclado en su seno elementos no santos.
No todos los que honran a Cristo con sus labios lo honran también con su corazón. Como solamente Dios puede leer el corazón humano, los verdaderos escogidos son visibles para Dios, pero en cierta medida nos son invisibles a nosotros. La iglesia invisible es transparente pero completamente visible para Dios. La tarea de los escogidos es hacer que esta iglesia invisible se torne visible.
La iglesia es una, santa, católica, y apostólica. La iglesia es una. Aunque está dividida en denominaciones, los escogidos están unidos por un Señor, una fe, y un bautismo. La iglesia es santa porque ha sido santificada por Dios y el Espíritu Santo mora dentro de ella. La iglesia es católica (la palabra católica significa "universal") porque sus miembros se extienden alrededor de todo el mundo, e incluye en su seno a pueblos de todas las naciones.
La iglesia es apostólica porque las enseñanzas de los apóstoles, como están contenidas en las Sagradas Escrituras, son el fundamento de la iglesia y la autoridad que gobierna la iglesia.
Es el deber y el privilegio de todos los cristianos permanecer unidos a la iglesia de Cristo. Es nuestra solemne responsabilidad no olvidarnos de reunirnos con los santos en la adoración comunitaria, permanecer bajo el cuidado y la disciplina de la iglesia, y trabajar activamente como testigos en la misión de la iglesia.
La iglesia no es tanto una organización como un organismo. Está conformada por partes vivas. Se la llama el cuerpo de Cristo.
Del mismo modo que el cuerpo humano está configurado para funcionar Como una unidad a través del trabajo cooperativo e interdependiente de sus muchas partes, así también la iglesia es un cuerpo que muestra su unidad y su diversidad. Aunque está gobernada por una "cabeza" -Cristo el cuerpo tiene muchos miembros, cada uno con los dones y las riquezas que Dios les ha dado para contribuir a la obra de todo el cuerpo.
RESUMEN
1. La iglesia está compuesta por aquellas personas que pertenecen al Señor.
2. La palabra bíblica para iglesia significa "aquellos que han sido llamados".
3. La iglesia sobre la tierra es siempre un cuerpo donde están mezclados los cristianos con los no cristianos.
4. La iglesia invisible es visible únicamente a Dios.
5. La iglesia es una, santa, católica y apostólica.
6. La iglesia es un organismo, similar al cuerpo humano.
PASAJES BÍBLICOS PARA LA REFLEXIÓN
Mateo 13:24-43, 1 Corintios 12:12-14, Efesios 2: 19-22, Efesios 4: 1-6, Colosenses 1:18, Apocalipsis 7:9-10.

3. NATURALEZA DE LA IGLESIA

DESCRIPCIÓN GENERAL DE LA IGLESIA

La principal palabra que se usa en el Antiguo Testamento para designar al pueblo de Dios, se deriva del verbo «llaman, y en el Nuevo Testamento la palabra empleada para referirse a la Iglesia, significa «llamar fuera». Ambas se refieren a una asamblea de personas llamadas por Dios.
DIFERENTES SIGNIFICADOS DE ESTA PALABRA EN EL NUEVO TESTAMENTO
Generalmente indica una iglesia local, ya sea reunida para culto o no. Hech. 5: 11; 11:26; Rom. 16:4; 1.a Cor. 11:18; 16:1. Algunas veces la expresión «La iglesia que está en su casa», se refiere a alguna iglesia doméstica o al grupo de creyentes que se reunían en un hogar privado. Romanos 16:5, 23; 1.a Cor. 16:19; Col. 4:15, pero en el sentido más general indica a todo el cuerpo de creyentes, en el cielo o en la tierra, Efesios 1:22; 3; 10, 21; 5:23 y Colosenses 1:18-24.
EL SENTIDO DE LA PALABRA IGLESIA
Los católicos romanos difieren de los protestantes con respecto a la naturaleza esencial de la Iglesia. Los primeros creen que indica una organización externa y visible que consiste de los sacerdotes, juntamente con los obispos, arzobispos, cardenales y el Papa; los protestantes rompieron con este concepto externo y buscaron el sentido de Iglesia, en una comunión invisible y espiritual de los santos.
La Iglesia, en su naturaleza esencial, incluye a los creyentes de todas las edades y a nadie más. Es el cuerpo espiritual de Jesucristo, en el que no hay lugar para los no creyentes.
DISTINCIONES QUE SE APLICAN A LA IGLESIA
Al hablar de la Iglesia en términos generales es necesario considerar algunas distinciones.
LA IGLESIA MILITANTE Y LA TRIUNFANTE
La Iglesia que existe actualmente en la tierra es la Militante, porque está llamada, y se halla actualmente empeñada en una guerra santa. La que está en el Cielo es la Triunfante, ya que ha cambiado la espada por la palma de victoria.
LA IGLESIA INVISIBLE Y LA VISIBLE
Esta distinción se aplica a la misma iglesia que se halla sobre la tierra, la cual es invisible en lo que se refiere a su naturaleza espiritual, de modo que es imposible determinar con exactitud quiénes pertenecen o no a ella; sin embargo, se hace visible en la profesión y conducta de sus miembros; por el ministerio de la Palabra, los sacramentos y en su organización y gobierno externo.
LA IGLESIA COMO ORGANISMO Y COMO INSTITUCIÓN
Esta distinción se aplica sólo a la Iglesia Visible. Se caracteriza, como organismo, por la vida de comunión de los creyentes, y por su oposición al mundo; y como organización por sus oficios, administración de la Palabra y de los sacramentos y por ciertas formas de gobierno eclesiástico.
DEFINICIONES DE LA IGLESIA
La Iglesia Invisible puede ser definida como la compañía de los elegidos, llamados por el Espíritu de Dios, o simplemente, como la comunión espiritual de los creyentes; y la Visible puede definirse como la comunidad o conjunto de aquellos que profesan la fe verdadera, juntamente con sus hijos. Debe tenerse en cuenta que la membresía de unos y otros no es exactamente igual
LOS ATRIBUTOS Y MARCAS DE LA IGLESIA
Hay tres atributos especiales de la Iglesia y asimismo tres marcas o características externas.
SUS ATRIBUTOS. SON LOS TRES SIGUIENTES
1. SU UNIDAD. Según el católico-romano esta unidad consiste en una imponente organización mundial, mas para los protestantes es la unidad espiritual del cuerpo de Jesucristo.
2. SU SANTIDAD. Los católico-romano hacen consistir la santidad de la Iglesia en sus santos dogmas, sus preceptos morales, su culto y su disciplina; pero los Protestantes hacen radicar la santidad en los propios miembros de la Iglesia como santos en Cristo, es decir, santos en principio, al ser poseedores de la nueva vida que está destinada a ser perfectamente santa.
3. SU UNIVERSALIDAD. Roma hace de este punto una pretensión especial, porque su Iglesia está esparcida por toda la tierra, y tiene mayor número de miembros que todas las denominaciones evangélicas juntas. Los Protestantes declaran empero que únicamente la Iglesia Invisible de Cristo es realmente la Iglesia Católica, porque incluye a todos los creyentes de todas las edades y de todos los países.
SUS MARCAS O CARACTERÍSTICAS EXTERNAS
Mientras que los atributos pertenecen principalmente a la iglesia invisible, las marcas o señales pertenecen a la iglesia visible y sirven para distinguir la verdadera iglesia de la falsa. También son tres.
1. LA VERDADERA PREDICACIÓN DE LA PALABRA DE DIOS. Esta es la señal más importante de la Iglesia. La Juan 4; 1-3; 2: Juan 9. No significa que la predicación tiene que ser perfecta y absolutamente pura sino que debe ser verdadera en cuanto a los fundamentos de la religión cristiana, y que ha de ejercer una influencia controladora en cuanto a fe y práctica.
2. LA RECTA ADMINISTRACIÓN DE LOS SACRAMENTOS. Los sacramentos no pueden ser separados de la Palabra, como hacen los católicos. Deben ser administrados por ministros legales, según la institución divina; sólo pueden ser administrados a los creyentes y a sus descendientes, Mateo 18:19; Marcos 16:16; Hechos 2:42; 1 Corintios 11:23, 30.
3. EL FIEL EJERCICIO DE LA DISCIPLINA. La disciplina es necesaria para mantener la pureza de la doctrina y salvaguardar la santidad de los sacramentos. La palabra de Dios insiste en esto, Mateo 18:18; 1.a Corintios 5: 1-13; 14:33, 40; Apoc. 2:14, 15, 20.
TEXTOS PARA APRENDER DE MEMORIA PASAJES QUE TESTIFICAN SOBRE:
LA UNIDAD DE LA IGLESIA
1. Juan 10:16. «Otras ovejas tengo que no son de este redil las cuales también me conviene traer, y ellas oirán mi voz, y habrá un rebaño y un pastor».
2. Juan 17:20. «N o ruego solamente por estos, sino por los que han de creer en Mí por ola Palabra de ellos, para que sean todos una cosa».
3. Efesios 4:4-6. «Un cuerpo y un Espíritu, así como sois llamados a una misma esperanza de vuestra vocación. Un Señor, una fe, un bautismo; un Dios y Padre de todos, el cuales sobre todas las cosas y por todas las cosas, y en todos vosotros».
LA SANTIDAD DE LA IGLESIA
1. Éxodo 19:6. «Y seréis para mí un reino de sacerdotes y una nación santa».
2. 1ª Pedro 2:9. «Pero vosotros sois una raza escogida, real sacerdocio, gente santa, pueblo adquirido, para que anunciéis las virtudes de Aquel que os ha llamado de las tinieblas a su luz admirable».
LA CATOLICIDAD DE LA IGLESIA
1. Salmo 2:8. «Pídeme y te daré por heredad las gentes y por posesión tuya los reinos de la tierra».
2. Apoc. 9:7. «Después de estas cosas miré y he aquí una gran compañía 'la cual ninguno podía contar, de todas las gentes, linajes, pueblos y lenguas, que estaban delante del trono y del Cordero, vestidos de ropas blancas y palmas en sus manos».
LA NECESIDAD DE ADHERIRSE A LA VERDAD
1. 2ª Tim. 1:13. «Retén la forma de las sanas palabras que has oído de mí, en la fe y amor que es en Cristo Jesús».
2. 2ª Timoteo 2:15. «Procura diligentemente presentarte a ti mismo como obrero aprobado, que no tiene de qué avergonzarse, que traza bien la palabra de verdad».
3. 1ª Timoteo 2:1. «Habla tú las cosas que pertenecen a la sana doctrina».
LA NECESIDAD DE LA RECTA ADMINISTRACIÓN DE LOS SACRAMENTOS.
1. Hechos 19:4 y 5. «Pablo dijo: Juan bautizó con el bautismo de arrepentimiento diciendo al pueblo que creyesen en aquel que había de venir después de él, es a saber en Jesús el Cristo. Y cuando oyeron esto fueron bautizados en el nombre del Señor Jesús». 1ª Corintios 11:28-30. «Cada uno examínese a sí mismo y coma de aquel pan y beba de aquella copa, porque el que come y bebe indignamente juicio come y bebe para sí, no discerniendo el cuerpo del Señor. Por esto hay entre vosotros muchos debilitados y enfermos y muchos duermen».
LA NECESIDAD DE LA DISCIPLINA
1. Mateo 16:19. «Ya ti daré las llaves del Reino de los Cielos, y todo lo que ligares en la tierra será ligado en el Cielo, y todo lo que desatares en la tierra será desatado en el Cielo».
2. 1ª Timoteo 3:10-11. «Rehúsa hombre hereje después de una o dos amonestaciones, sabiendo que el tal es trastornado y peca».
PARA ESTUDIO BÍBLICO ADICIONAL
1. ¿Existió la Iglesia antes de Pentecostés? Véase Mateo 18:17; Hechos 7:38.
2. ¿Se usa la palabra iglesia en singular en él Nuevo Testamento para significar un grupo de iglesias 1 Véase Hechos 9:31?
3. ¿Qué motivos para disciplina había en la iglesia de Corinto? 1ª Corintios 5:1- 5,13; 17:34; 2.a Corintios 2:5-11.
PREGUNTAS PARA REPASO
1. ¿Qué significa la palabra iglesia en la Escritura según su etimología?
2. ¿Qué diferentes significados tiene esta palabra en el Nuevo Testamento?
3. ¿En qué difieren los católicos de los protestantes en el concepto de iglesia?
4. ¿Cuál es la diferencia entre la Iglesia Militante y la Triunfante?
5. ¿A qué iglesia se aplica la distinción de visible e invisible?
6. ¿En qué sentido se llama a la Iglesia invisible?
7. ¿En qué se diferencia la iglesia como organismo y como institución?
8. ¿Cómo podemos definir la Iglesia Invisible y la Visible?
9. ¿Cuáles son los atributos de la iglesia?
      10. ¿En qué se diferencia nuestro concepto de los católicos?
      11. ¿Cuáles son las marcas de la iglesia y para qué sirven?
      12. ¿Se refieren estas marcas a la Iglesia Invisible o a la Visible?
      13. ¿Cómo debemos concebir la verdadera predicación de la Palabra?
      14. ¿Qué significa la recta administración de los sacramentos?
      15. ¿Por qué es necesaria la disciplina?

4. LAS MARCAS DE LA IGLESIA VERDADERA

Como el mundo está lleno de miles de instituciones distintas llamadas iglesias, y como es posible que tanto los instituciones como los individuos se conviertan en apóstatas, es Importante que podamos discernir las marcas esenciales de la iglesia vis¡~l: legítima y verdadera. Ninguna iglesia está libre del error o el pecado. Solo en el cielo la iglesia será perfecta. Pero existe una diferencia significante entre la corrupción, que afecta a todas las instituciones, y la apostasía. Por lo tanto, para proteger el desarrollo y el cuidado del pueblo de Dios, es importante que definamos las marcas de una iglesia verdadera.
Las marcas de una iglesia verdadera han sido definidas históricamente como:
(1) la predicación verdadera de la Palabra de Dios,
(2) el uso de los sacramentos de acuerdo con su institución, y:
(3) la práctica de la disciplina de la iglesia. " .
(1) LA PREDICACIÓN DE LA PALABRA DE DIOS. Aunque las Iglesias difieren sobre detalles de teología y en grados de pureza de la doctrina, la iglesia verdadera afirma todo lo que es esencial para la fe cristiana. Del mismo modo, una iglesia es falsa o apóstata cuando oficialmente niega una de las premisas esenciales de la fe cristiana como la deidad de Cristo, la Trinidad, la justificación por la fe: la expiación, u otras doctrinas esenciales para la salvación. La Reforma, por ejemplo, no fue una Simple lucha por menudencias, sino por la doctrina cardinal de la salvación.
(2) LA ADMINISTRACIÓN DE LOS SACRAMENTOS. Negar o difamar los sacramentos instituidos por Cristo es falsificar la iglesia. La profanación de la Cena del Señor o el ofrecimiento voluntario de los sacramentos a no cristianos profesantes descalificaría a una iglesia de ser reconocida como una iglesia verdadera.
(3) LA DISCIPLINA DE LA IGLESIA. Aunque el ejercicio de la disciplina de la iglesia en ocasiones puede ser equivocado en la dirección de ser demasiado severo o demasiado laxo, puede convertirse en algo tan pervertido que ya deje de ser reconocido como legítimo. Por ejemplo, si una iglesia de manera abierta e impenitente suscribe, practica, o se niega a disciplinar los pecados graves y perversos, no está exhibiendo esta marca de una iglesia verdadera.
Aunque los cristianos deberían estar solemnemente precavidos de no convertirse en cismáticos en su espíritu, o tener espíritu de división o discusión, también deberían estar advertidos de su obligación de apartarse de comuniones falsas o apóstatas. Todas las iglesias verdaderas, en mayor o menor grado, deberán exhibir las verdaderas marcas de una iglesia. La reforma de la iglesia es una tarea que no tiene fin. Cada vez más y más buscamos ser fieles al llamado bíblico de la predicación, los sacramentos y la disciplina de la iglesia.
RESUMEN
1. Una iglesia verdadera tiene marcas visibles que la diferencian de una iglesia falsa o apóstata.
2. La predicación del evangelio es necesaria para que una iglesia sea legítima.
3. La administración correcta de los sacramentos, sin profanación, es una marca de la iglesia.
4. La disciplina contra la herejía y los pecados graves es una tarea necesaria dentro de la iglesia.
5. La iglesia siempre necesita ser reformada de acuerdo con la Palabra de Dios.
PASAJES BÍBLICOS PARA LA REFLEXIÓN
Mateo 18:15-17, Romanos 11:13-24, 1 Corintios 1:10-31, Efesios 1:22-23, 1 Pedro 2:9-10.

5. LA EXCOMULGACIÓN

Ser excomulgado de la iglesia de Cristo es algo terrible. Sin embargo hay un solo pecado tan serio que merezca el alejamiento del cuerpo de Cristo. Este pecado es el de la impenitencia. Hay múltiples pecados graves que requieren de la disciplina de la iglesia.
Sin embargo, como la disciplina de la iglesia es un proceso con varios pasos en donde la excomulgación constituye el último paso, el único pecado que nos puede hacer llegar a dicho extremo es el negarse a arrepentirse del pecado que inició el proceso en primer lugar.
La excomulgación es la medida disciplinaria más extrema de
la iglesia. Implica excluir al pecador impenitente de la comunión con los fieles. La doctrina proviene de la enseñanza de Jesús sobre el atar y el desatar (Mateo 16:19; 18:15-20; Juan 20:23). La responsabilidad de disciplinar recayó sobre la iglesia. El pasaje en Mateo 18, sin embargo, enumera tres pasos que deben ser dados antes de la excomulgación. El pecador debe ser corregido en primer lugar en privado. Si dicha instancia fracasara, entonces deberá ser corregido delante de testigos. Esto asegura que el acusador no haya estado equivocado en la primera instancia y evita que se hagan acusaciones difamatorias. En tercer lugar, el pecador deberá ser traído frente a toda la congregación de creyentes.
Si esta última instancia fracasara, la iglesia deberá dejar de tener comunión con el ofensor. Debe notarse que la excomulgación nunca debe ser realizada con un sentido de venganza. Todo el proceso, hasta la excomulgación e incluyéndola, es una forma de disciplina diseñada para que la persona impenitente regrese al redil. Llegado el extremo de la excomulgación, la parte culpable será librada al diablo. La intención no es castigar sino buscar que la parte culpable tome conciencia de su pecado. Juan Calvino sostenía que la disciplina de la iglesia es "la mejor ayuda" para la sana doctrina, el orden y la unidad .
La Confesión de Westminster enumera cinco propósitos para la excomulgación: Las censuras de la iglesia son necesarias, para reclamar y ganar los hermanos que han ofendido, para evitar que otros cometan  ofensas similares, para purgar la levadura que podría infectar toda la masa, para reivindicar el honor de Cristo, y la santa profesión del evangelio, y para evitar la ira de Dios, que con justicia podría caer sobre la Iglesia, SI esta permitiera que su pacto, y los sellos del pacto, fuesen profanados por los ofensores notorios y obstinadas, esta lista podría posiblemente ser reducida a dos razones principales: la preocupación por el alma del pecador y la preocupación por la salud de la iglesia.
La disciplina de la iglesia ha sido encomendada por Cristo, y es un asunto que requiere de gran prudencia. La iglesia puede equivocarse de dos maneras. Puede convertirse en una iglesia demasiado laxa y no disciplinar adecuadamente a los que hacen de la fe un motivo de escándalo, o puede convertirse en demasiado severa y faltarle la caridad que Dios ordena.
No se debería invocar la disciplina de la iglesia cuando se trata de temas triviales o menores. Las nimiedades pueden convertirse en la ruina del pueblo de Dios. Hemos sido llamados a tener un espíritu de paciencia y de tolerancia unos con otros, del mismo modo que Dios es paciente con nosotros. La Escritura nos llama a tener la clase de amor que "cubre multitud de pecados".
RESUMEN
1. La Excomulgación es el paso final en la disciplina de la iglesia.
2. La impenitencia es el único pecado que resulta en la excomu1gación.
3. Cristo instituyó el proceso de la disciplina de la iglesia.
4. El propósito de la excomu1gación es la restauración del ofensor y la protección de la iglesia.
5. La disciplina de la iglesia no debe ser ni laxa ni severa.
6. Los cristianos deben ejercer un amor que es paciente y tolerante.
PASAJES BÍBLICOS PARA LA REFLEXIÓN
Mateo 7:1-5, 1 Corintios 11:27-32, 1 Timote05:19-20, 1 Corintios 5, 1 Timoteo 1:18-20, 1 Pedro 4:8.

6. LOS SACRAMENTOS

La palabra sacramento se utilizó históricamente para referirse a algo que era sagrado. La palabra latina sacramentum se utilizó para traducir la palabra del Nuevo Testamento misterio. En un sentido amplio todos los ritos y ceremonias religiosas pueden ser llamados sacramentos. Con el tiempo, la palabra sacramento tomó un significado más restricto y preciso, definidos como un signo visible por el que Dios ofrece su promesa de gracia de una manera externa. Los signos externos sellan y confirman las promesas del pacto de Dios.
Los sacramentos consisten en algún elemento visible como el agua, el pan o el vino; una acción determinada ordenada por Dios en asociación con el signo; y un beneficio redentor brindado al creyente. La Iglesia Romana Católica fijó en siete el número de los sacramentos (en un sentido especial). Son el Bautismo, la Confirmación, la Eucaristía (la Cena del Señor), la Penitencia, el Matrimonio, la Ordenación Sacerdotal, y la Extremaunción.
El protestantismo histórico limita el número de los sacramentos a dos: el Bautismo y la Cena del Señor. Aunque los protestantes reconocen otros ritos como el matrimonio y la ordenación para funciones especiales, no consideran que estos ritos alcancen el nivel de los sacramentos. Los sacramentos se limitan a:
(1) las ordenanzas instituidas directamente por Cristo,
(2) las ordenanzas que por su propia naturaleza son importantes,
(3) las ordenanzas diseñadas para ser perpetuas, y:
(4) las ordenanzas diseñadas para significar, instruir y sellar a los creyentes que las reciben en la fe.
Los sacramentos son los medios verdaderos de gracia que transmiten las promesas de Dios. Su poder no reside en los propios elementos, sino en Dios, del que son signos. Su poder no depende tampoco del carácter o de la fe de quienes los administran, sino de la integridad de Dios.
Los sacramentos son formas no verbales de comunicación. Nunca fue la intención que se sostuvieran por sí solos sin referencia a la Palabra de Dios. Los sacramentos confirman la Palabra de Dios, de modo que la administración de los sacramentos y la predicación de la Palabra van siempre juntas.
La salvación no proviene por medio de los sacramentos. La salvación es por la fe en Cristo. Sin embargo, ahí donde la fe esté presente, los sacramentos no serán ignorados ni dejados de lado.
Forman una parte vital de la adoración a Dios y del desarrollo de la vida cristiana. Aunque los sacramentos implican el uso de formas externas, no deben ser despreciados como formalismos o rituales vacíos. Si bien pueden corromperse y convertirse en rituales vacíos, no deben ser rechazados. Sin duda que constituyen rituales, pero han sido rituales instituidos por Dios y por lo tanto debemos participar de ellos con gozo y solemnemente.
RESUMEN
1. Un sacramento es un signo visible de la promesa de gracia de Dios a los creyentes.
2. La Iglesia Católica reconoce siete sacramentos, mientras que los protestantes reconocen dos: el Bautismo y la Cena del Señor.
3. Los sacramentos no transmiten automáticamente las cosas que representan. El contenido de los sacramentos se recibe por la fe.
4. Los sacramentos no son rituales vacíos, sino que fueron instituidos por Cristo.
5. Los sacramentos deben ser vinculados con la predicación de la Palabra.
PASAJES BÍBLICOS PARA LA REFLEXIÓN
Mateo 28: 19-20, Hechos 2:40-47, Romanos 6:1-4, 1 Corintios 11:23-34, Gálatas 3:26-29.

7. EL BAUTISMO

El bautismo es el signo sacramental del Nuevo Pacto. Es el símbolo que Dios utiliza para sellar su palabra en los escogidos de que están incluidos en el pacto de la gracia.
El bautismo significa varias cosas. En primera instancia, es un signo del lavamiento y la remisión de los pecados. También significa que hemos sido regenerados por el Espíritu Santo, sepultados y resucitados juntamente con Cristo, que el Espíritu Santo ha venido a morar dentro de nosotros, que hemos sido adoptados por la familia de Dios y que hemos sido santificados por el Espíritu Santo.
El bautismo fue instituido por Cristo y debe ser administrado en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. El signo externo no transmite automáticamente o por medio de magia las realidades que significa. Por ejemplo, aunque el bautismo significa la regeneración, o el nuevo nacimiento, no transmite automáticamente este nuevo nacimiento. El poder del bautismo no está en el agua sino en el poder de Dios.
La realidad a la que este sacramento apunta puede estar presente antes o después de que el signo del bautismo ha sido dado. En el Antiguo Testamento el signo de la alianza era la circuncisión. La circuncisión era, entre otras cosas, un signo de fe. En el caso de los adultos, como fue el caso de Abraham, la fe fue previa al signo de la circuncisión. Con los hijos de los creyentes, sin embargo, el signo de la circuncisión les era dado antes que su posesión de la fe, como fue el caso de Isaac. Del mismo modo, en el Nuevo Pacto, la teología de la Reforma requiere que los adultos convertidos deban ser bautizados después de haber hecho su profesión de fe, mientras que sus hijos reciben el bautismo antes de profesar la fe.
El bautismo significa el lavamiento con agua. El mandamiento a bautizar puede ser cumplido por inmersión, por aspersión o por ablución. La palabra griega bautizar incluye cualquiera de estas tres posibilidades.
La validez del bautismo no depende del carácter del ministro que lo administra o del carácter de la persona que lo recibe. El bautismo es un signo de la promesa de Dios de salvar a todos quienes creen en Cristo. Como es una promesa de Dios, la validez de esta promesa depende del carácter fiel de Dios.
Como el bautismo es el signo de la promesa de Dios, no debe ser administrado a una persona más de una vez. Ser bautizado más de una vez es poner una sombra de duda sobre la integridad y la sinceridad de la promesa de Dios. Sin duda que quienes han sido bautizados dos o más veces no intentan poner en duda la integridad de Dios, pero su acción, si la entendemos correctamente, comunicaría dicha duda. Es el deber de cada uno de los cristianos, sin embargo, ser bautizado. No se trata de un ritual sin ningún contenido, sino de un sacramento instituido por nuestro Señor.
RESUMEN
1. El bautismo es el signo sacramental del Nuevo Pacto.
2. El bautismo tiene múltiples significados.
3. El bautismo fue instituido por Cristo y debe ser administrado con agua en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo.
4. El bautismo no transmite automáticamente el nuevo nacimiento.
5. El bautismo puede ser administrado por inmersión, por aspersión o por ablución.
6. La validez del bautismo depende de la integridad de la promesa de Dios y debería ser administrado a una persona una única vez.
PASAJES BÍBLICOS PARA LA REFLEXIÓN
Romanos 4:11-12, Romanos 6:3-4, 1 Corintios 12:12-14, Colosenses 2:11-15, Tito 3:3-7.

8. LA CENA DEL SEÑOR

Martín Lutero rechazó la doctrina de la transustanciación sostenida por la Iglesia Romana Católica, según la cual el pan y el vino de la Eucaristía son convertidos realmente en el cuerpo y la sangre de Cristo. Lutero no veía ninguna necesidad para esta doctrina.
La posición de Lutero era que la presencia de Cristo no sustituía la presencia del pan y el vino sino que era agregada al pan y al vino. Lutero sostenía que el cuerpo y la sangre de Cristo de algún modo estaban presentes con, en, y bajo los elementos del pan y el vino. Es costumbre llamar a la posición luterana la consustanciación porque la sustancia del cuerpo y la sangre de Cristo está presente con (por eso el uso del prefijo con) la sustancia del pan y el vino. Los teólogos luteranos, sin embargo, no están satisfechos con la palabra consustanciación y protestan que se la entiende en términos muy estrechamente asociados a la doctrina católica de la transustanciación.
Pero resulta claro que Lutero insistió sobre la presencia sustancial y físicamente real de Cristo en la Cena del Señor.
Repetidas veces citó las palabras de Jesús cuando instituyó la Cena, "Este es mi cuerpo", como prueba. Lutero no quería permitir que el verbo es fuese tomado en un sentido figurado o representativo.
Lutero también adoptó la doctrina de la comunicación de los atributos por la cual los atributos divinos de la omnipresencia eran comunicados a la naturaleza humana de Jesús, haciendo posible que su cuerpo y su sangre estuviesen presentes en más de un lugar al mismo tiempo.
Zuinglio y otros argumentaron que las palabras de Jesús, "Este es mi cuerpo" realmente significaban "Esto representa mi cuerpo". Jesús con frecuencia utilizó el verbo ser con este sentido figurado. Dijo: "Yo soy la puerta", "Yo soy la vid verdadera", etc. Zuinglio y otros argumentaron que el cuerpo de Cristo no está presente en su sustancia real en la Cena del Señor.
La cena es solo una conmemoración, y la presencia de Cristo no es distinta a su presencia normal por medio del Espíritu Santo.
Juan Calvino, por otro lado, cuando debatía con Roma y con Lutero, negaba la presencia "sustancial" de Cristo en la Cena del Señor. Sin embargo, cuando debatía con los anabaptistas, que reducían la Cena del Señor a una mera conmemoración, insistía en la presencia "sustancial" de Cristo.
Superficialmente parecería ser que Calvino estaba atrapado en una contradicción flagrante. Sin embargo, si nos detenemos en los detalles, vemos que Calvino utilizó el término sustancial de dos maneras diferentes. Cuando se dirigía a los católicos y a los luteranos, utilizaba el término sustancial para significar "físico". Negaba la presencia física de Cristo en la Cena del Señor. Cuando se dirigía a los anabaptistas, insistía en el término sustancial en el sentido de "real".
Calvino de ese modo estaba argumentando que Cristo estaba presente de manera verdadera y real en la Cena del Señor, aunque no en un sentido físico.
Como Calvino rechazó la idea de la comunicación de atributos de la naturaleza divina a la naturaleza humana, fue acusado de separar o dividir las dos naturalezas de Cristo y de cometer la herejía nestoriana, que había sido condenada por el Concilio de Calcedonia en el año 451 d.C. Calvino respondió que él no estaba separando ambas naturalezas sino que las estaba distinguiendo entre sí.
La naturaleza de Jesús está localizada en el presente en el cielo. Permanece en perfecta unión con su naturaleza divina.
Aunque la naturaleza humana está contenida en un lugar, la persona de Cristo no está contenida del mismo modo porque su naturaleza humana todavía tiene el poder de la omnipresencia.
Jesús dijo: "He aquí yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo" (Mateo 28:20). A pesar de sus limitaciones, y del riesgo de ser malentendidos, a continuación damos una ilustración de lo que estamos diciendo.
La naturaleza humana está sometida al tiempo y el espacio. La naturaleza divina no está sometida a nada.
Calvino enseñó que aunque el cuerpo y la sangre de Cristo permanecen en el cielo, espiritualmente nos son "hechos presentes" por la naturaleza divina y omnipresente de Jesús 1. Dondequiera que esté presente la naturaleza divina de Cristo, Él está verdaderamente presente. Esto es consistente con la propia enseñanza de Jesús que "se iba" pero que sin embargo nos continuaría acompañando. Cuando nos encontramos con Él en la Cena del Señor, tenemos comunión con Él.
Al encontrarnos en su presencia divina, somos traídos a su presencia humana místicamente, porque su naturaleza divina nunca se separa de su naturaleza humana. La naturaleza divina nos guía al Cristo ascendido, y en la Cena del Señor tenemos un atisbo de lo que es el cielo.
RESUMEN
1. Lutero enseño que el cuerpo y la sangre de Cristo eran agregados con, en, y debajo de los elementos del pan y del vino.
2. Zuinglio enseño que la Cena del Señor era una conmemoración.
3. Calvino negó la presencia física de Cristo en la Cena del Señor, pero afirmó la presencia real de Cristo.
4. La naturaleza humana de Cristo está localizada en el cielo; su naturaleza divina es omnipresente.
PASAJES BÍBLICOS PARA LA REFLEXIÓN
Mateo 26:26-29, 1 Corintios 10:13-17, 1 Corintios 11:23-34.

9. LA TRANSUSTANCIACIÓN

No hay un momento más solemne o sagrado en la vida de la iglesia que la celebración de la Cena del Señor. Se la llama también la Eucaristía porque durante esta comida tiene lugar un encuentro especial entre Jesús y su pueblo. En ese momento Jesús está presente con nosotros de una manera singular.
La pregunta es: ¿Cómo puede Cristo estar presente con nosotros en la Cena del Señor? Esta pregunta ha sido motivo de controversia sin fin entre los cristianos. No solo ha sido una cuestión de contienda entre el protestantismo y el catolicismo romano, sino que también ha sido una arena de conflicto que los líderes de la Reforma -Lutero, Calvino, y Zuinglio- no pudieron resolver entre ellos.
La Iglesia Romana Católica enseña la doctrina de la transustanciación. La transustanciación significa que durante la misa tiene lugar un milagro por el cual la sustancia de los elementos ordinarios del pan y del vino se convierte en la sustancia del cuerpo y la sangre de Cristo. Para los sentidos humanos, el pan y el vino no exhiben ningún cambio perceptible. Pero los católicos creen que aunque los elementos todavía se asemejan al pan y al vino, que saben como el pan y el vino, que huelen como el pan y el vino, etc., se convierten realmente en la carne y la sangre de Cristo.
Para entender este milagro se requiere que conozcamos algo sobre la filosofía de Aristóteles. Aristóteles enseñó, para expresarlo en términos sencillos, que cada objeto (entidad) se compone de sustancia y accidentes. La sustancia es la esencia más profunda, "la materia prima" de algo. Los accidentes se refieren a la apariencia exterior, externa, o superficial de un objeto. Se refieren a las cualidades de un objeto que vemos, sentimos, olemos y saboreamos.
Para Aristóteles había siempre una relación inseparable entre un objeto y sus accidentes. Un olmo, por ejemplo, tiene siempre la sustancia y los accidentes de ser un olmo. Para que algo tuviera la sustancia de una cosa y los accidentes de otra cosa sería necesario un milagro.
Sustancia = Esencia
Accidentes = Cualidades externas perceptibles
Sustancia Cuerpo y Sangre de Cristo
Accidentes = Pan o y vino
Este es el milagro de la transustanciación. Los elementos del pan y del vino se convierten en la sustancia del cuerpo y la sangre de Cristo. Mientras tanto, los accidentes del pan y del vino permanecen. Por lo tanto, en la misa tenemos la sustancia del cuerpo y la sangre de Cristo sin los accidentes del cuerpo y la sangre, y los accidentes del pan y del vino sin la sustancia del pan y del vino.
Antes que el milagro tenga lugar, tenemos la sustancia y los accidentes del pan y del vino.
Pan y Vino = Sustancia y accidentes
El mana de Jesús se extendiese por todo el mundo se requeriría la deificación de la naturaleza humana. Tanto Lutero como la Iglesia Romana Católica enseñaron que la naturaleza divina de Cristo (que tiene los atributos de la omnipresencia) comunica este poder a la naturaleza humana para que la naturaleza humana, aunque normalmente localizada, pueda estar presente en más de un lugar al mismo tiempo.
Pero para Calvino y para otros, esta idea de la comunicación de los atributos divinos a la naturaleza humana era considerada una violación del Concilio de Calcedonia (451 d. C.), que había afirmado que las dos naturalezas de Cristo, su humanidad y su divinidad, estaban unidas de manera de ser sin confusión, sin mutación, sin división y sin separación, cada naturaleza conservando sus propios atributos. Entonces, para Calvino como para la mayoría de los pensadores de la Reforma, la transustanciación manifestaba una forma de herejía.
Después que el milagro tuvo lugar, tenemos la sustancia del cuerpo y la sangre de Cristo sin los accidentes del pan y del vino.
De mayor importancia que la controversia que rodea la transustanciación está la cuestión sobre la naturaleza humana de Jesús. El cuerpo y la sangre pertenecen a la humanidad de Jesús y no a su deidad. Como la misa se celebra en distintas partes del mundo al mismo tiempo, la cuestión es, ¿Cómo puede la naturaleza humana de Jesús (el cuerpo y la sangre) estar en más de un lugar al mismo tiempo? La potestad de ser omnipresente, de estar igualmente presente en todos lados, es un atributo de la deidad, no de la humanidad. Para que fuera posible que la naturaleza humana.
 RESUMEN
1. La transustanciación significa que, durante la misa, el pan y el vino se transforman milagrosamente en el cuerpo y la sangre de Cristo, mientras que se aparecen a los sentidos como pan y vino.
2. La sustancia se refiere a la esencia de una cosa, mientras que los accidentes se refieren a las cualidades externas perceptibles.
3. La transustanciación requiere que se faculte a la naturaleza humana de Cristo con el poder de los atributos divinos, para que su cuerpo y su sangre puedan estar en más de un lugar al mismo tiempo.
4. Calvino rechazó la transustanciación como una violación del Concilio de Calcedonia.
PASAJES BÍBLICOS PARA LA REFLEXIÓN
Marcos 14:22-25, 1 Corintios 11:23-26.

10. EL DÍA DE REPOSO

La santidad del día de reposo fue instituida en la creación. Después de su obra creativa de seis días, Dios descansó en el séptimo día y lo sacralizó. Al sacralizarlo, Dios estaba apartando al séptimo día. Lo consagró como santo. El guardar correctamente el día de reposo fue uno de los Diez Mandamientos dados en el monte Sinaí, Es importante recordar que su institución constituía una parte integral del pacto de la creación. En el Antiguo Testamento, la violación del día de reposo representaba una ofensa capital.
La palabra traducida como el día de reposo significa "séptimo". Por eso es que algunas personas insisten en que el sábado es el único día apropiado para celebrar el día de reposo, y que es ilegítimo observarlo en domingo. Sin embargo, el cristianismo histórico siempre ha observado el día domingo como el día de reposo porque en el Nuevo Testamento es "el día del Señor", el día en que Cristo resucitó. El principio del día de reposo, uno en siete, permanece intacto. El día de reposo semanal tiene un efecto perpetuo desde la creación y fue guardado por los apóstoles.
La pregunta sobre la manera adecuada de guardar el día de reposo continúa siendo tema de debate entre los teólogos. La mayoría está de acuerdo con que el día de reposo incluye un mandato a descansar de todo lo que no sea el comercio o las tareas imprescindibles. El día de reposo es también el tiempo para la adoración comunitaria y para la dedicación especial al estudio de la Palabra de Dios. Es un momento especial para regocijarnos en la resurrección de Cristo y en la esperanza de nuestro reposo sabático en el cielo.
El desacuerdo se centra alrededor del papel de la función de recreación y las obras de misericordia. Algunos consideran a la función de recreación como una violación terrenal del día de reposo, mientras que otros insisten en que es una parte importante en el descanso y la renovación del cuerpo. La Biblia en ningún lugar explícitamente promueve o prohíbe la función de recreación en el día de reposo, aunque el significado implícito de placer en Isaías 58: 13 podría sugerir que está prohibido.
Un debate menos estridente se centra en la cuestión de las obras de misericordia. Muchos apelan al ejemplo de Jesús del ministerio especial en el día de reposo como un mandamiento implícito para los cristianos para que en el día de reposo se comprometan activamente en obras de misericordia, como el visitar a los enfermos. Otros contienden que el ejemplo de Jesús prueba que es legítimo y bueno comprometerse de esa manera, pero que lo que está permitido no necesariamente está requerido.
(Que dichas obras de misericordia no están limitadas al día de reposo es obvio).
RESUMEN
1. El día de reposo fue instituido en la creación y todavía está vigente.
2. El día de reposo significa "séptimo". Se refiere a un ciclo de un día en siete días.
3. La iglesia primitiva celebró el día de reposo en el día del Señor, trasladando el día de reposo del sábado al domingo (el primer día de la semana).
4. El día de reposo requiere el cese del trabajo regular (excepto los trabajos imprescindibles) y la asamblea de los santos en la adoración comunitaria.
5. Hay desacuerdo en cuanto a si está bien realizar la función de recreación y sobre la necesidad de obras de misericordia en el día de reposo.
PASAJES BÍBLICOS PARA LA REFLEXIÓN
Génesis 2:1-3, Éxodo 20:8-11, Isaías 58:13-14, Mateo 12:1-14, Hechos 20:7, 1 Corintios 16:1-2, Apocalipsis 1:10.

11. LOS JURAMENTOS Y LOS VOTOS

Siendo niño recuerdo haber oído la fábula sobre George Washington y el cerezo. Cuando el pequeño George se enfrentó a su padre angustiado por la destrucción antojadiza de un cerezo, el pequeño dijo: "No sé decir una mentira; yo corté al árbol".
Me llevó años darme cuenta que la confesión de Washington era en realidad una mentira. Decir "no sé decir una mentira" ya es mentir sobre la capacidad que uno tiene para mentir. Hay muchas cosas que George Washington no podía hacer: no podía volar; no podía estar en más de un lugar al mismo tiempo, etc.
Pero sin duda que George Washington podía decir una mentira. Era un hombre. Todos los seres humanos son capaces de mentir.
La Escritura nos dice que "todo hombre es mentiroso" (Salmo 116: 11). Esto no significa que todos mientan todo el tiempo.
También tenemos la capacidad de decir la verdad. El problema surge cuando se nos pide que confiemos en la palabra de alguien, y no podemos saber con certeza si nos está diciendo la verdad.
Para resaltar la importancia de la verdad al hacer promesas y dar testimonios importantes, recurrimos a los juramentos y los votos. Antes de testificar en un juicio, el testigo debe prestar juramento. Él o ella prometen "decir la verdad, toda la verdad, y nada más que la verdad. Que así me ayude Dios".
En el juramento, se apela a Dios y solo a Dios como el testigo supremo de la aseveración. Dios es el guardián de los votos, los juramentos y las promesas. Él es la fuente de toda verdad y es incapaz de mentir. Lo que era falso en el caso de George Washington, es verdadero en el caso de Dios. Dios no puede mentir (Tito 1:2; Hebreos 6:17-18). Dios tampoco soporta a los mentirosos.
Nos advierte sobre el riesgo de prometer con ligereza o con falsedad: "Cumple 10 que prometes. Mejor es que no prometas, y no que prometas y no cumplas" (Eclesiastés 5:4-5). Los Diez Mandamientos incluyen una ley contra el dar falso testimonio (Éxodo 20: 16).
Como nuestra entera relación con Dios se basa en las promesas de la alianza, Dios consagra el tema de los votos, los juramentos y las promesas. Para el bienestar de la sociedad es necesario que se establezca la confianza en cualquier relación humana (como el matrimonio y los acuerdos comerciales). Un juramento legítimo es parte de la adoración por la cual las personas, buscando asegurar la veracidad de lo que dicen, buscan el respaldo de Dios como testigo de lo que afirman y prometen. Lo que esto implica es que si quienes prestan juramento luego mienten, Dios los castigará de manera rápida y severa.
La iglesia cristiana siempre ha afirmado el valor de los juramentos y los votos. Los ministros de Westminster enumeraron las siguientes limitaciones y estipulaciones escriturales:
Los hombres solo deben jurar por el nombre de Dios, y por lo tanto deben hacerlo con todo santo temor y reverencia. Por lo tanto, el jurar en vano o con ligereza, por ese nombre glorioso y tremendo, o el jurar por cualquier otra cosa, es pecado y debe ser aborrecido. Sin embargo, como en materia de peso y oportunidad, el juramento está respaldado por la Palabra de Dios, tanto en el Nuevo Testamento como en el Antiguo; un juramento legal, impuesto por una autoridad legal, en dicha materia, debe ser prestado.
Una estipulación adicional es que un juramento no debería ser hecho con reservas mentales o equívocas. Dios no acepta los dedos cruzados, sino que espera la honestidad. Un juramento no puede prestarse con ligereza. Debería ser reservado para las ocasiones más solemnes, para las promesas solemnes. Hasta los gobiernos reconocen esto al insistir en la prestación de juramentos para el caso del matrimonio y antes de prestar testimonio frente a un tribunal. Pero además, aun en ocasiones menos solemnes, el creyente es llamado a la honestidad -para que su sí, sea sí; y su no, sea no. Esta es la responsabilidad de un fiel discípulo de Cristo.
RESUMEN
1. Los seres humanos tienen la capacidad de mentir.
2. Dios, la fuente de la verdad, no puede mentir y es el guardián de la verdad.
3. Los juramentos y los votos son parte legítima de la adoración.
4. Los juramentos deberían ser prestados únicamente por el nombre de Dios. Ninguna criatura puede ser el último testigo de la verdad.
5. Los juramentos no deberían ser hechos con ligereza o con reservas.
PASAJES BÍBLICOS PARA LA REFLEXIÓN
Deuteronomio 10:20, 2 Crónicas 6:22-23, Esdras 10:5, Mateo 5:33-37, Santiago 5: 12.

12. LA PALABRA DE DIOS Y LOS SACRAMENTOS EN GENERAL

La Palabra de Dios es el más importante medio de gracia, aun cuando los católicos atribuyen este honor a los sacramentos.
LA PALABRA DE DIOS Y EL ESPÍRITU SANTO
Si bien la expresión «medios de Gracia» tiene un significado más amplio, se usa aquí para designar los medios que emplea la Iglesia de un modo directo. Cuando nos referimos aquí a la Palabra de Dios no nos referimos a la Segunda Persona de la Trinidad, o sea Cristo, quien es llamado el Verbo en Juan 1:1; ni a la palabra creadora que se menciona en el Salmo 33 :6, sino a la Palabra de Dios contenida en la Sagrada Escritura Y predicada por la Iglesia. 1.' Pedro 1:25. Es llamada la Palabra de Gracia, y por tanto es el más importante de los medios de Gracia. Aunque su énfasis principal es en la predicación también puede ser traída a los hombres por otros medios. En el hogar, en la escuela, por medio de conversación y literatura religiosa.
La Palabra De Dios se hace efectiva como medio de Gracia tan sólo por la operación del Espíritu Santo. La Palabra por sí sola no es suficiente para obrar la fe y la conversión, pero es el instrumento necesario. Aun cuando el Espíritu Santo puede hacerlo, generalmente no obra aparte de la Palabra de Dios. Y la predicación de la Palabra fructifica por la operación del Santo Espíritu.
LAS DOS PARTES DE LA PALABRA, COMO MEDIO DE GRACIA
Son la Ley y el Evangelio. La Ley, como medio de Gracia, sirve al propósito de traer los hombres a la convicción de pecado, Rom. 3:20, haciéndoles conscientes de su incapacidad para responder a las demandas de la Ley. De este modo es su tutor para llevarle a Cristo, Gálatas 3:24. En segundo lugar constituye también regla de fe para los creyentes, recordándoles sus deberes y guiándoles por el camino de vida y salvación.
El Evangelio es la clara presentación del camino de salvación revelado en Jesucristo. Exhorta al pecador a venir a Cristo con fe y arrepentimiento, y promete a todos aquellos que verdaderamente se arrepienten y creen todas las bendiciones de la salvación, para el presente y el futuro. Es el poder de Dios para salvación a toda aquel que cree. Rom. 1:16; 1.a Cor. 1:18.
LOS SACRAMENTOS EN GENERAL
La Palabra de Dios es completa como medio de gracia; pero los sacramentos no lo son sin la Palabra. Esto tiene que ser mantenido en oposición a los católicos romanos quienes enseñan que los sacramentos son medios esenciales de salvación. La Palabra y los Sacramentos difieren en los siguientes detalles:
1. La Palabra de Dios es absolutamente necesaria, mientras que los sacramentos no lo son.
2. La Palabra sirve para engendrar y fortificar la fe, mientras que los sacramentos sólo pueden fortificarla, no engendrarla.
3. La Palabra es para todo el mundo, mientras que los sacramentos son sólo para los creyentes y su descendencia.
MERECEN ATENCIÓN LOS SIGUIENTES PUNTOS
LAS DIVERSAS PARTES DE LOS SACRAMENTOS
Se distinguen tres cosas en los sacramentos, que son:
1: La señal visible o externa. Cada uno de los sacramentos requiere un elemento externo. Agua en el bautismo; pan y vino en la Cena del Señor. El que recibe estos signos externos recibe el sacramento, pero no todo el ni la parte más importante, a menos que llene las condiciones requeridas.
2.  La gracia interna y espiritual que lo acompaña. Un signo o símbolo externo señala e inclina nuestra atención a lo que significa y este es el lado interno del sacramento. Este significado puede ser «La justicia que es por la fe», Rom. 4:11. El perdón de los pecados. Marcos 1:14. Arrepentimiento y fe, Marcos 1:4; 16:16, o «Comunión con Cristo en su muerte y resurrección», Rom. 6:3, 4; Col. 2:11, 12.
3. La unión entre el signo y lo que significa. Esto último constituye realmente la esencia del sacramento. Cuando el sacramento es recibido con fe, la gracia de Dios lo acompaña. El sacramento puede ser definido de este modo: Es una ordenanza santa, instituida por Cristo, en la cual la gracia de Dios en Cristo es representada por medio de signos sensibles, siendo sellada y aplicada a los creyentes, quienes a su vez expresan por medio de ellos su fe y obediencia a Dios.
EL NÚMERO DE LOS SACRAMENTOS
En el tiempo del Antiguo Testamento había sólo dos sacramentos, la circuncisión y la Pascua. El primero fue instituido en días de Abraham y el último en tiempos de Moisés. Ambos eran sacramentos sangrientos, en armonía con la dispensación del Antiguo Testamento. La Iglesia del Nuevo Testamento tiene también dos sacramentos, que son: El bautismo y la Cena del Señor; ambos no sangrientos.
Después que Cristo realizó su perfecto sacrificio ya no es necesaria la efusión de sangre. La Iglesia Romana ha ampliado el número de sacramentos, sin razón bíblica para ello, añadiendo la confirmación, la penitencia, el orden, el matrimonio y la extremaunción.
COMPARACIÓN ENTRE LOS SACRAMENTOS DEL ANTIGUO Y DEL NUEVO TESTAMENTO
La Iglesia de Roma sostiene que hay una diferencia esencial: Dicen que los antiguos eran simplemente típicos y afectaban tan sólo a la situación legal del recipiente y no a su condición espiritual, dependiendo su efectividad de la fe de aquellos que lo realizaban; mientras que los del Nuevo Testamento conceden gracia espiritual a los corazones de los que los practican, sea cual fuere su condición espiritual, simplemente en virtud de una eficacia sacramental. Nosotros creemos que no hay diferencia esencial con aquéllos, no existiendo la gracia sacramental «ex-opereoperato», Romanos 4:11; 1a Cor. 5:7; 10:1-4; Col. 2:11. Sin embargo, hay algunas diferencias de carácter dispensacional.
1. Los sacramentos del Antiguo Testamento tenían un aspecto nacional en adición a su significado espiritual.
2. Aquellos señalaban adelante, al sacrificio de Cristo que había de venir, mientras que los del Nuevo Testamento señalan atrás, al completo sacrificio realizado.
3. Aquellos no proporcionaban al recipiente una medida tan rica de gracia espiritual como lo hacen los sacramentos del Nuevo Testamento.
TEXTOS PARA APRENDER DE MEMORIA
LA PALABRA DE DIOS COMO MEDIO DE GRACIA
1. Rom. 10: 17. «Luego, la fe es por el oír y el oír por la Palabra de Dios.
2. 1ª Cor. 1:18. «Porque la Palabra de la cruz es locura a los que se pierden, mas no a los que se salvan, es a saber a nosotros es potencia de Dios».
LA DOBLE FUNCIÓN DE LA LEY
1. Rom. 3:20. «Porque por las obras de la ley ninguna carne se justifica delante de El; porque por la ley es el conocimiento del pecado».
2. Rom. 7:7. « ¿Qué pues diremos? ¿La Leyes pecado? En ninguna manera, empero yo no conocí el pecado sino por la Ley, porque tampoco conocí la concupiscencia, si la ley no dijera: no codiciarás».
3. 1a Juan 5:3. «Porque este es el amor de Dios, que guardemos sus mandamientos, y sus mandamientos no son penosos».
LA FUNCIÓN DEL EVANGELIO
1. Romanos 1:16. «Porque no me avergüenzo del Evangelio, porque es potencia de Dios para salvación a todo aquel que cree; al judío primeramente y también al griego».
2. 1 Cor. 1:18. (Citado arriba en punto a).
EL SIGNIFICADO ESPIRITUAL DE LOS SACRAMENTOS
1. Rom. 4:11. «Y recibió la circuncisión por señal, por sello de la justicia de la fe que tuvo en la circuncisión».
2. 1a Cor. 5:7. «Pues nuestra Pascua que es Cristo fue sacrificada por nosotros».
3. Col. 2:12. «Sepultados juntamente con él en el bautismo, en el cual también resucitasteis Con él, por la fe de la operación de Dios que le levantó de los muertos».
4. Juan 6:51. «Yo soy el pan vivo que he descendido del cielo; si alguno comiere de este pan vivirá para siempre, y el pan que yo daré es mi carne la cual yo daré por la vida del mundo».
PARA ESTUDIO BÍBLICO ADICIONAL
1. ¿Es la Ley también una regla de conducta para los creyentes del Nuevo Testamento? Mat. 5:17-19; Rom. 13:10; Ef. 6:2; Santo 2:8-11; 1.a Juan 3:4; 5-3.
2. ¿Puede usted probar que los sacramentos son solamente para los creyentes y su descendencia? Gén. 17:10; Éx. 12:43-45; Marc. 16:16; Hech. 2:39; 1.a Cor. 11:28-29.
3. ¿Qué disputa se levantó en la Iglesia primitiva acerca de la circuncisión? Hech. 15; Gál. 2:3-9.
PREGUNTAS PARA REPASO
1. ¿Qué significa la expresión «medios de gracia»?
2. ¿Qué queremos significar cuando hablamos de la «Palabra de Dios como medio de Gracia»?
3. ¿Por qué es la Palabra el más importante medio de gracia?
4. ¿Cuál es la relación entre la Palabra y el Espíritu?
5. ¿Cuál es la función de la Ley como medio de gracia?
6. ¿Cuál es la función del Evangelio?
7. ¿Cómo se relacionan los sacramentos con la Palabra de Dios?
8. ¿En qué se diferencia la Palabra de Dios de los sacramentos, como medio de gracia?
9. ¿Qué es un sacramento?
      10. ¿Cuáles son las partes que componen un sacramento?
      11. ¿Qué es el símbolo externo en cada uno de los sacramentos?
      12. ¿Qué hecho significa cada uno de ellos?
      13. ¿Cómo se relacionan la señal y la cosa significada en cada uno de los sacramentos? 

13. GOBIERNO Y AUTORIDAD DE LA IGLESIA

Cristo es la cabeza de la Iglesia, Y la razón de toda su autoridad. Mat. 23:10; Juan 13:13; 1ª Cor. 12:5; Efe. 1:20-23; 4:11, 12; 5:23, 24. El gobierna la Iglesia, no por la fuerza, sino por Su Palabra y por el Espíritu. Todos los oficiales de la Iglesia, se hallan revestidos con la autoridad de Cristo, y deben someterse ellos mismos al control de Su Palabra.
LOS OFICIALES DE LA IGLESIA
Los oficiales de la Iglesia mencionados en el Nuevo Testamento, son de dos clases:
OFICIALES EXTRAORDINARIOS
De éstos los más importantes fueron los apóstoles. En el sentido más estricto, este título se aplica sólo a los doce escogidos por Jesús, ya Pablo; pero también es dado a algunos otros hombres del período apostólico. Hechos 14:4, 14; 1a Cor. 9:5, 6; 1ª Cor. 8:23; Gál. 1:19. Los apóstoles tenían ciertas cualidades especiales: Habían sido llamados directamente por Cristo, Gál. 1:1; vieron a Cristo después de su resurrección; 1 Cor. 9:1; tenían conciencia de ser inspirados, 1ª Cor. 2:13; realizaban milagros, 2ª Cor. 12:12; y eran ricamente bendecidos en sus labores, 1.a Cor. 9:1. El Nuevo Testamento habla también de profetas que 'eran hombres especialmente dotados para hablar Y edificar la Iglesia, y ocasionalmente predecían sucesos futuros, Hechos 11:28; 13, 1,2; 15:32; Ef. 4:11. Y finalmente se mencionan los evangelistas, que auxiliaban a los apóstoles en su trabajo, Hech. 21:8; Efe. 4: 11; 2ª Tim. 4:5.
OFICIALES ORDINARIOS
Se hace frecuente mención de los ancianos, especialmente en los Hechos de los Apóstoles, Hechos 11 :30; 14 :23; 15:2; 6 :22; 16:4; 20: 17; 21: 18; con ellos se mencionan los obispos, nombre que se emplea para designar a la misma clase de oficiales, Hechos 20:17, 28; 1.a Tim. 3:1; 5:17, 19; Tito 1 :5, 7; 1:' Pedro 5 :1-2.
Aunque ambos nombres se aplicaban al mismo cargo, la palabra anciano parece hacer énfasis acerca de su edad, y el nombre de obispo a su obra como sobreveedores.
Los ancianos, no eran todos maestros, pero la función de enseñar, entraba gradualmente en su oficio. Efesios 4:11; 1.' Tim. 5:17; 2.a Tim. 2:2. Según 1.a Tim. 5:7, parece que algunos ancianos simplemente gobernaban, mientras que otros enseñaban. En adición a éstos, el Nuevo Testamento habla también de diáconos, Fil. 1:1; 1.a Tim. 3:8, 10, 12. Prevalece la opinión de que esta institución procede de Hechos 6:1, 6.
LAS ASAMBLEAS ECLESIÁSTICAS
Las Iglesias reformadas tienen varios cuerpos gobernantes, de relación gradual entre sí. Son conocidos como Consistorio, Clase y Sínodo. El Consistorio lo constituyen el ministro y los ancianos de la Iglesia local; el «Clasis» lo forman un ministro y un anciano de cada Iglesia, dentro de un distrito determinado. El Sínodo está constituido por un ministro y un anciano de cada una de los Clasis.
EL GOBIERNO DE LA IGLESIA LOCAL
Es de carácter representativo. El ministro y los ancianos, elegidos por el pueblo, forman un Concilio o Consistorio para el gobierno de la Iglesia. Hechos 14:23; 20:17 y Tito 1:5. Aun cuando los ancianos son elegidos por el pueblo, no reciben su autoridad de sus electores, sino de Jesucristo, el Señor de la Iglesia. Cada Iglesia local, es una Iglesia completa, plenamente equipada para gobernarse a sí misma, pero al afiliarse con otras Iglesias, para formular acuerdos comunes, dejan de ser enteramente independientes. El orden eclesiástico, sirve para preservar los derechos e intereses de la Iglesia local, así como los derechos e intereses colectivos de las Iglesias afiliadas.
LAS ASAMBLEAS MAYORES
Al asociarse las Iglesias locales para dar mayor expresión a la unidad de la Iglesia, se hacen necesarias asambleas mayores, como las de los C1asis y Sínodos. El Concilio de Jerusalén, descrito en Hechos 15, tiene el carácter de una asamblea mayor. Los representantes inmediatos de los fieles, que forman los consistorios, son representados por un número limitado en los Clasis, y éstas a su vez, lo son en los Sínodos.
Las asambleas eclesiásticas, naturalmente tienen que tratar solamente de asuntos de doctrina y moral, del gobierno de la Iglesia y de la disciplina, sin embargo, las asambleas mayores deben ocuparse a veces de asuntos que por su naturaleza pertenecen a asambleas provinciales o menores, pero que por alguna razón no han podido ser solucionados en aquéllas, así como de asuntos que por su naturaleza pertenecen a las asambleas mayores de las provincias, por referirse a las Iglesias en general. Las decisiones de las asambleas mayores, no son simplemente amonestativas, sino autoritarias, a menos que explícitamente se declare que tienen solamente carácter de advertencia.
LA AUTORIDAD DE LA IGLESIA
La autoridad de la Iglesia es espiritual, porque es dada por el Espíritu Santo, Hechos 20:28. Es una manifestación de la autoridad del Espíritu, Juan 20:22, 23. Corresponde exclusivamente a los creyentes, 1a Cor. 5:12, 13, y solamente puede ser ejercitada por medios espirituales, 2.a Corintios 10:4. Hay también una autoridad ministerial, que nombre por los ministros de la Palabra. La Autoridad de la Iglesia es triple:
AUTORIDAD DOGMÁTICA O DE ENSEÑANZA
La Iglesia está encargada de mantener la verdad y de transmitirla fielmente de una generación a otra, y defenderla contra los esfuerzos de la incredulidad, 1." Timoteo 1:3, 4; 2.a Tim. 1:13; Tít. 3:9-11. Debe predicar la Palabra incesantemente entre todas las naciones del mundo, Isa. 3:10, 11; 2.a Cor. 5:20; 1.' Tim. 4:13; 2.' Tim. 2:15; 4:2; Tít. 2:1-10. Debe formular los credos y confesiones de fe y procurar la educación de sus futuros ministros, 2.a Tim. 2:2.
AUTORIDAD DE GOBIERNO
Dios es un Dios de orden, y desea que todas las cosas en la Iglesia sean hechas decentemente y Con orden, 1.a Cor. 14:33, 40. Por esta razón ha provisto reglas acerca de los asuntos de la Iglesia y ha dado autoridad a la Iglesia para hacer efectivas las leyes de Cristo, Juan 1:15-17. Hech. 20: 28; 1a Ped. 5:2. Esto incluye autoridad para ejercer la disciplina, Mat. 16:19; 18:18; Juan 20:23; 1a Cor. 5:2, 7 ,13; 2.a Tes. 3:14, 15; La Tim. 1:20, Tít. 3:10.
El propósito de la disciplina en la Iglesia es doble. En primer lugar cumplir la ley de Cristo respecto a la admisión y exclusión de miembros, y promover la edificación espiritual de los propios miembros, asegurando su obediencia a las leyes de Cristo. Si hay miembros enfermos espiritualmente, la iglesia debe buscar su curación, pero si fracasa en este empeño tiene que cortar los miembros contagiados. Debe sancionar los pecados públicos aun cuando no haya acusación formal; en el caso de pecados privados debe insistir en la aplicación de la regla dada en Mateo 18:15-18.
AUTORIDAD PARA EL MINISTERIO DE LA MISERICORDIA.
Cristo envió a sus discípulos no sólo a predicar sino también a curar toda clase de enfermedades. Mateo 10: 1, 8; Lucas 9:1, 2; 10:9, 17. Entre los primitivos cristianos había quienes tenían el don de sanidades, 1.a Cor. 12:9, 10, 28, 30, Este don especial terminó con la época apostólica. Desde entonces el ministerio de la misericordia quedó más bien limitado al cuidado de la Iglesia para los pobres. El Señor exhortó a esta tarea en Mateo 26:11; Marcos 14, 7. La iglesia Primitiva practicó una clase de comunidad de bienes de modo que nadie tuviera falta en cuanto a las necesidades de la vida, Hechos 4:34.
Más tarde se nombraron siete varones «para servir a las mesas», esto es, para proveer a una distribución más equitativa de lo que era traído para los pobres, Hechos 6:1-6. Después de esto los diáconos son mencionados repetidamente en Rom. 16:1, Fil. 1:1; 1.a Tim. 3: 12. Se hace gran énfasis en dar o recoger colectas para los pobres, Hechos 29:20, 35; 1.a Cor. 16:1, 2; 2.a Cor... 8:13-15; 9:1, 6,7; Gál. 2:10; 6:10; Ef. 4:28; 1 Tim. 5:10,16; Santo 1:27; 2:15,16; 1 Juan 3:17.
TEXTOS PARA APRENDER DE MEMORIA
QUE CRISTO ES LA CABEZA DE LA IGLESIA
1. Ef. 1:22, 23. «Y El lo dio por cabeza sobre todas las cosas a la Iglesia la cual es su cuerpo, la plenitud de Aquel que hinche todas las cosas en todo».
2. Colasen se s 1:18. «Y El es la cabeza del cuerpo que es la Iglesia. El que es el principio, el primogénito de los muertos para que en todo tengan el primado».
LAS SEÑALES ESPECIALES DEL APOSTOLADO
1. 1ª Cor. 9:1, 2. « ¿No soy apóstol? ¿No soy libre? ¿No he visto a Jesús el Señor, nuestro? ¿No sois vosotros mi obra en el Señor? Si a los otros no soy apóstol a vosotros ciertamente lo soy, porque el sello de mi apostolado sois vosotros en el Señor».
2. 2ª Cor. 12:12. «Con todo esto las señales del apóstol han sido hechas entre vosotros con toda paciencia, en señales y en prodigios y en maravillas».
EL OFICIO DE ANCIANO U OBISPO
1. Hechos 14:23. «Y habiéndoles constituido ancianos en cada una de las iglesias, y habiendo orado con algunos les encomendaron al Señor a quien habían creído».
2. 1a Timoteo 3:1. «Palabra fiel, si alguno apetece obispado buena obra desea».
3. Tito 1:5. «Por esta causa te dejé en Creta, para que corrigieses lo que falta y pusieses ancianos por las villas, así como yo te mandé».
LA FUNCIÓN DOCENTE DE ALGUNOS ANCIANOS
1. 1a Tim. 5:17. «Los ancianos que gobiernan bien, sean tenidos por dignos de doblada honra, mayormente los que trabajan en predicar y enseñar».
2. 2ª Tim. 2:2. «Y lo que has oído de mí entre muchos testigos, esto encarga a los hombres fieles, que serán idóneos para enseñar también a otros».
EL OFICIO DE DIÁCONO / EL CARÁCTER ESPIRITUAL DE LA OBRA DE LOS ANCIANOS
1. 1a Tim. 3:10. «Y estos también sean antes probados; y así ministren si fueren sin crimen».
2. Hechos 20:28. «Por tanto mirad por vosotros y por todo el rebaño en que el Espíritu Santo os ha puesto por obispos, para apacentar la Iglesia del Señor la cual ganó por su sangre».
3. 1a Pedro 5:2, 3. «Apacentad la grey de Dios que está entre vosotros teniendo cuidado de ella, no por fuerza, sino voluntariamente; no por ganancia deshonesta sino de un ánimo pronto; y no teniendo señorío sobre las heredades del Señor, sino siendo dechados de la grey».
AUTORIDAD PARA EJERCER LA DISCIPLINA
1. Mateo 18:18. «De cierto os digo que todo lo que ligareis en la tierra será ligado en el Cielo; y todo lo que desatareis en la tierra, será desatado en el Cielo».
2. Juan 20:23. «A quienes remitiereis los pecados, les son remitidos; a quienes los retuviereis, serán retenidos».
PARA ESTUDIO BÍBLICO ADICIONAL
1. ¿Qué hombres, además de los doce y Pablo son llamados apóstoles? Hechos 14:4, 14; 1a Cor. 9:5, 6; 2. Col. 28:23; Gál. 1:19.
2. ¿A quiénes se llama evangelistas en la Biblia? Hechos 2: 18; 2. a Tim. 4:5.
3. ¿Qué curso de disciplina es indicado con respecto a pecados privados en Mateo 18: 15, 17?
PREGUNTAS PARA REPASO
1. ¿Quién es la cabeza de la Iglesia y sobre qué norma la gobierna?
2. ¿Qué oficiales extraordinarios había en la Iglesia Apostólica?
3. ¿Cuáles eran las características de los apóstoles?
4. ¿Qué hacían los profetas y los evangelistas?
5. ¿Cuáles eran los oficiales ordinarios?
6. ¿Qué otro nombre Se aplicaba al cargo de anciano? ¿Predicaban todos?
7. ¿Cuándo fue instituido el oficio de diácono?
8. ¿Cuántas clases de asambleas eclesiásticas hay?
9. ¿Hasta dónde es independiente cada iglesia local?
  10. ¿Hay ejemplo en las Escrituras de otras asambleas mayores? ¿Dónde?
  11. ¿Cómo están constituidas y qué asuntos les corresponde tratar?
  12. ¿Son sus decisiones meramente de consejo o amonestativas?
  13. ¿Qué diferentes clases de autoridad tiene la Iglesia? ¿En qué consiste cada una de ellas? 

  14. ¿Cuál es el propósito de la disciplina de la Iglesia? ¿Qué entendemos por ministerio de Misericordia en la Iglesia?